Friday, March 21, 2008

Me acuerdo de una tarde en la que fui a jugar a la casa un chico del jardín de infantes que siempre se portaba mal. Fuimos con otro chico de la sala. La mamá había alquilado disfraces para todos. El anfitrión usaba el de Batman, el invitado el de Robin y yo el de Batichica. En un momento me puse a llorar porque los chicos jugaban entre ellos y a mí me dejaban afuera. Me acuerdo de que la madre los retó y terminaron los dos llorando.